martes, 31 de diciembre de 2013

2014 y el número 7.



Si sumamos las cifras que representan al número 2014 nos resultará 7. El número 7 es un número cabalístico y mágico. Podríamos decir que el año 2014 contiene toda la magia del número 7.

Si aceptamos lo expuesto, este año nos dará la oportunidad de eliminar, o al menos reducir, la agitación energética que nos crea malestar, tanto en nuestras relaciones con los otros, incluida la familia, como con nosotros mismos, ya que el número 7 regula todo lo relacionado con la vida.

Para alcanzar el equilibrio que el año nos brinda podemos comenzar reflexionando sobre:

Cada uno de nosotros es responsable de su propio bienestar psicológico, de su felicidad y de su éxito en la vida. Por mucho que deseemos el bien para otros, no podemos crear estabilidad mental, bienestar o felicidad para los demás. Sólo podemos ofrecerles un comportamiento equilibrado.

Nuestras acciones pueden haber sido causa directa o indirecta de sus problemas, y, sin embargo, los demás tienen la responsabilidad única de resolver sus propios problemas, cualquiera que haya sido su causa. Sólo podemos ofrecerles nuestro cambio.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 11 – 2



Haciendo un repaso de lo que hemos tratado en el curso hasta ahora, parece interesante reflexionar sobre lo que puede ser el enfoque del próximo trimestre.

Hemos comentado que nuestra conducta actual viene determinada por el conjunto de creencias, definiciones y “manipulaciones” que han ejercido sobre nosotros todas las personas que han participado en nuestro “adiestramiento”. Esto nos lleva a dejarnos controlar por medio de las emociones negativas aprendidas, nos sentimos bloqueados para ser personas asertivas y comenzamos nuestro juego de manipulación. Comenzamos a recurrir a la agresión pasiva, la huida pasiva y la contra manipulación, en un intento de de conseguir cierto control sobre nuestro comportamiento.

Es el momento de abordar las siguientes propuestas para ahondar en nuestro cambio personal:

1. Identificar las creencias no asertivas que adquirimos a causa de nuestros sentimientos de ansiedad, ignorancia y culpabilidad y de cómo esas creencias permiten a otras personas manejarnos a su antojo.

2. Ejercer el derecho que tenemos a poner fin, de manera asertiva, a la manipulación de nuestro comportamiento por otros.

3. Aprender las técnicas verbales sistemáticas encaminadas a permitirnos imponer nuestros derechos asertivos.

4. Liberarnos del intento de manipulación que nos embarga y que no nos permite ser personas asertivas.

En la asertividad tan importante es ejercer nuestros derechos como respetar los derechos de los demás. Tenemos que caminar en ambos sentidos.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 11.

Podríamos aprovechar estas fechas, en las que nuestras relaciones se intensifican, para identificar con claridad qué tipo de comportamiento tenemos.

Venimos diciendo que una persona puede ser pasiva, agresiva o asertiva y toda la gama que pueda darse en la combinación de estos tres tipos.

Para preservar nuestra vida, para defendernos, utilizamos la huida, la lucha o el diálogo.

La huida es más propia de las personas pasivas y está muy relacionada con el miedo. La lucha es más propia de las personas agresivas y está muy relacionada con la ira, con la violencia. El diálogo es más propio de personas “evolucionadas” y está muy relacionado con la capacidad de mantener la templanza.

En una persona más pasiva también se dan la huida y la lucha. Veamos dos ejemplos:
- Huida pasiva.- Es aquella que realizamos “escondiéndonos” de las personas con las que tengamos que resolver algún conflicto, aunque este conflicto sea “inventado” por nosotros. Si dejamos de comprar al frutero habitual, comenzamos a dar rodeos para no pasar por su puesto de la fruta, creemos que tenemos la obligación de darle explicaciones. También cuando no cogemos el teléfono de alguien porque no nos atrevemos a hablar con claridad de un asunto.
- Agresión pasiva.- Es aquella agresión que realizamos como respuesta a la “obligación” de hacer algo que consideramos no debemos hacer, o no queremos hacer. Si el jefe nos ordena recoger su traje del tinte y nosotros lo “maltratamos” de manera que se arrugue para que se fastidie. Estas agresiones pasivas suelen volverse contra nosotros. Es muy probable que el jefe nos ordene llevar de nuevo el traje al tinte para que “lo planchen bien”.

Reflexiona. ¿Practicas la huida pasiva?. ¿Realizas algunas agresiones pasivas?.

Estas actitudes crean agitaciones energéticas negativas. Potenciaremos la templanza para enfrentarnos con éxito a estos comportamientos no asertivos.


miércoles, 18 de diciembre de 2013

Cosas de la clase 11.



En el desarrollo de un comportamiento asertivo es muy importante eliminar, o al menos reducir, el ego.

Hemos observado, en la práctica realizada en clase, que la eliminación de la importancia personal (del ego), ayuda en gran medida a aceptar las faltas o errores que cometemos, y eso nos ayuda a no entrar en enfrentamientos violentos ni actitudes ansiosas o defensivas. Objetivos de las técnicas asertivas: “aserción negativa” y “banco de niebla”.

Para ayudar a eliminar el ego comentamos las siguientes propuestas:

No sentirse ofendidos.
Lo que nos ofende (energía agresiva del ofensor) sólo contribuye a debilitarnos. Sentirnos ofendidos, necesariamente, crea la misma energía destructiva que nos ofende, y esta energía negativa nos lleva a la guerra.

Liberarnos de la necesidad de ganar.
Empeñarnos en ganar es un método infalible para evitar el contacto consciente con la intención. Este empeño en ganar, en competir con todos, nos aparta de la intención. Del propósito real de nuestra vida.

Liberarnos de la necesidad de tener razón.
Esta es una necesidad del ego, de nuestra importancia personal. Es fuente de conflictos y nos empuja a mostrar que los demás están equivocados.

Liberarnos de la necesidad de ser superiores.
La necesidad de mostrarnos mejores que otros es una necesidad de la importancia personal. Se trata de ser mejores de lo que éramos antes.

Liberarnos de la necesidad de tener más.
La pelea continua por tener más elimina la posibilidad de llegar a alguna parte. Pero este es el momento presente. Ya estás aquí, ya has llegado. Ahora, decide cómo utilizar este momento.

Liberarnos de la necesidad de identificarnos con nuestros logros.
No podemos pensar que somos lo que hemos logrado. Yo soy la persona que tiene tres pisos. Yo soy tres pisos. Somos el observador que llevamos dentro.

Liberarnos de la fama
La fama es la descripción que hace otro de ti, por tanto, está en la cabeza de otro, no está en ti, tú no puedes hacer nada con ella, no tienes ningún control.

domingo, 15 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 10 – 2



Ya hemos dicho en la nota anterior (más cosas de la clase 10) que la técnica “aserción negativa” se utiliza para enfrentarte o defenderte de la manipulación que puedan ejercer sobre ti, basándose en la crítica de tus faltas o errores.

¿Pero, qué pasa cuando somos nosotros los que manipulamos criticando los errores de otros?. Descubrimos que somos personas agresivas, no asertivas. Si observas que:

1. Te crees siempre portador de la razón y es el otro el equivocado.
2. Si exiges que todos piensen y actúen como tu.
3. Si siempre crees que la culpa es de otro.
4. Si usas el sarcasmo sutil y observaciones ofensivas para que los otros duden de sí mismos.
5. Si usas la creación de culpa como táctica manipuladora.
6. Si usas con los otros la intimidación encubierta haciéndoles sentir vergüenza y culpa.
7. Si eres propenso a mentir de forma sutil o encubierta.

Tienes que abordar, de manera seria, un cambio en tu forma de ser para transformarte en una persona asertiva.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 10.



Hemos comentado, sin profundizar, las técnicas asertivas sistemáticas, aquí va algo sobre la “aserción negativa”.

Para conseguir un comportamiento asertivo tenemos que revisar nuestro comportamiento actual y cambiarlo si es necesario. Esto dependerá del grado de asertividad que cada uno de nosotros tengamos.

Un aspecto importante del comportamiento asertivo es la aceptación de nuestros errores (aserción negativa). Esta técnica nos enseña a aceptar nuestros errores y faltas (sin tener que excusarnos por ellos) mediante el reconocimiento decidido y comprensivo de las críticas, hostiles o constructivas, que se formulan a propósito de nuestras cualidades negativas. Por eso hemos de aprender a observarnos de una manera neutral.

La incorporación de esta técnica a nuestro comportamiento conlleva rebajar en gran medida la importancia de nuestro ego. Librarnos de nuestro ego nos permitirá sentirnos a nuestras anchas aun reconociendo los aspectos negativos de nuestro comportamiento o de nuestra personalidad, sin tener que adoptar actitudes defensivas o ansiosas, ni vernos obligados a negar un error real, consiguiendo al mismo tiempo reducir la ira o la hostilidad de nuestros críticos.

Si critican tu comportamiento porque has cometido un error, no intentes taparlo, ni darle la vuelta, simplemente acéptalo. Observa que tu cuerpo se siente mejor y tu energía conserva el equilibrio, sin agitaciones negativas. Después puedes proponerte mejorar para que no se repita.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

Cosas de la clase 10.



Dentro de las técnicas de asertividad que venimos comentando encontramos una que propone “preparar” aquellos encuentros que pueden resultar “delicados”. A veces nos encontramos con personas que tienen una idea fija de algo y su comportamiento es inamovible. En estos casos la preparación es necesaria ya que trataremos un tema que necesita cierta delicadeza porque la otra persona debe cambiar su idea de las cosas.

En clase propusimos cuatro pasos que nos pueden ayudar en esta tarea:

1. Explica la situación actual tal como la percibes. Es importante ser breve y ceñirse al tema principal que nos ocupa. No debemos caer en comentarios u opiniones que no vienen al caso.

“Controlas todos mis movimientos y exiges que te mantenga informada de todo lo que hago”

2. Muestra a la otra persona que entiendes sus sentimientos, su posición ante el tema a tratar. Después expresa los tuyos.

“Se que te preocupas por mí”, “pero yo me siento vigilado”

3. Hay que decir lo que se quiere. Establecer las mínimas exigencias posibles y ser realista. No tiene sentido exigir cosas que son físicamente imposibles para la otra persona. En algunos casos hay que estar preparados para negociar o comprometerse, para establecer un “acuerdo viable”.

“Quiero que dejes de controlarme, ya soy un adulto, y quiero que me trates como tal”

4. Explica cuál crees que será el resultado, nombrando las recompensas si cumple, o las penalizaciones si no lo hace.

“Si no dejas de controlarme no puedo continuar aquí”.

Esta “preparación” vale para tratar con situaciones difíciles y también para “hacer” cambios de conducta en tu ámbito familiar, profesional o social.

Analiza tu propia conducta y utiliza las pautas que se exponen para llegar a ser una persona más asertiva. Será muy valioso para enfrentarte satisfactoriamente a las personas difíciles que encuentres en tu vida.

domingo, 8 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 9 - 2



Queremos resaltar, para concluir nuestros comentarios sobre la crítica, que la crítica injusta, destructiva o inapropiada es una agresión. No podemos ser personas asertivas si mantenemos en nosotros el hábito de la crítica injusta o inapropiada, ya que seremos personas que agreden a otras personas.

Observa la corriente de energía que se produce en ti cuando criticas a otra persona de manera injusta. Percibirás la violencia y la “maldad” que acompaña a tu crítica. Esa agitación energética negativa está satisfaciendo un aspecto de tu ego y sólo desea reforzar tu importancia personal, o busca, con “artimañas”, dañar a la otra persona. Esta corriente de energía estresa, perjudica y desestabiliza nuestra armonía.

Después de reflexionar sobre todo lo expuesto relativo a la crítica podemos comprobar que, si es importante encontrar herramientas para enfrentarse a las críticas que nos hagan otras personas, mucho más importante es erradicar en nosotros ese tipo de crítica, ya que impulsa y dinamiza corrientes de energía negativa.

Salimos muy perjudicados cada vez que hacemos una crítica injusta, destructiva o inapropiada.

viernes, 6 de diciembre de 2013

Más cosas de la clase 9.



Eliminar en nosotros el hábito de la crítica injusta o destructiva conlleva dos aspectos importantes: uno consiste en identificar qué emociones nos impulsan a realizar una crítica de este tipo, y otro, es el uso correcto de la energía. La persona que hace un uso correcto de su energía puede llegar a ser una persona impecable.

Para identificar qué emociones nos mueven a realizar críticas injustas podemos contestar con honestidad estas preguntas (toma papel y lápiz y escribe tus respuestas. Este es uno de esos ejercicios importantes que debemos hacer):

1.- ¿A quien critico?.
2.- ¿Qué critico?
3.- ¿Qué me mueve a criticar?.

Puede quedar algo así. “Critico a mi compañero de trabajo Alberto. Digo por ahí que todo lo hace lento y mal. Me mueve la envidia porque quiero ser mejor que él”.

Alberto no hace caso de esta crítica (es una persona asertiva), sigue trabajando bien, incluso mejor. Sin embargo la persona que realiza la crítica está malgastando su energía y reforzando un estado de ánimo que le destruye poco a poco. Pero esto se puede remediar si haces lo que sigue:

- Recuerda las últimas críticas negativas que hayas hecho y pon a su lado la emoción que te movía.
- Cuando tengas identificada la emoción que te movía intenta “descubrir” en la persona criticada algún aspecto positivo. Como por ejemplo: Alberto es solidario; es leal; trabaja bien equipo.
- Una vez identificado el aspecto positivo repítelo mentalmente: “Alberto trabaja bien en equipo”; “Alberto trabaja bien en equipo”, al mismo tiempo observa qué “flujo de energía” se crea en ti y lo comparas con el flujo provocado por la crítica. Es importante identificar los flujos de energía sin contaminarlos con sentimientos, en este ejercicio tenemos que ser sobrios. Cuando hables de Alberto con otros compañeros, resalta lo bien que trabaja Alberto en equipo.
- La envidia debe retirarse.

Destierra en ti las críticas injustas y destructivas e inicia el camino de la impecabilidad.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Cosas de la clase 9



En esta clase hemos ahondado en la crítica y hemos concluido que la crítica, sea del sentido que sea, siempre crea en nosotros una agitación energética.
La técnica asertiva, para enfrentarnos a las críticas, nos da cuatro posibilidades para mantener “armonizada” nuestra energía, para no dejar que se cree una agitación energética no deseada:
1.- Si la crítica es injusta no hacemos caso, no entramos en la pelea.
2.- Si la crítica es justa aceptamos la crítica y nos proponemos una acción de mejora.
3.- Si la crítica es justa, pero exagerada. Aceptamos la parte justa y nos proponemos mejorar. No hacemos caso a la parte exagerada, no entramos en la pelea.
4.- Si la crítica es negativa, contestamos con una pregunta (por qué crees que …..)

Para ser personas asertivas (personas que no agreden ni se someten a la voluntad de otras personas, sino que manifiestan sus convicciones y defienden sus derechos) hemos de conseguir erradicar en nosotros la crítica injusta, y sólo hacer una crítica constructiva cuando sea necesario. Esta actitud mantiene armonizada nuestra energía.

Todos hemos creado, y hemos aceptado, estructuras arbitrarias aplicándolas a la relación que determina cuales son las reglas del bien y del mal. Establecemos cómo deberían ser las cosas.

Pongamos un ejemplo. Para una persona levantarse temprano, airear la casa y hacer la limpieza es lo primero y lo que hay que hacer. Esas personas criticaran como “personas sucias” a las que no lo hagan según su “estructura manipulativa”. Con la crítica tratan de “manipular tu comportamiento” para que hagas las cosas según ellas desean.

Se propone identificar en qué estructuras creadas por ti, o aceptadas, te apoyas para hacer tus críticas. ¿Tratamos de manipular, mediante la crítica, a otras personas para que hagan las cosas según nosotros deseamos?. Reflexiona detenidamente.